Los dijo el Simeone la temporada pasada. “Esta Liga está peligrosamente preparada para que la gane el Real Madrid”. Se equivocó. El Barcelona termino llevándose el campeonato.
La afirmación bien podría servir para la actual. El técnico del Atlético deMadrid se precipitó. Era esta Liga la que ya lleva el nombre del conjunto blanco.
Goles que no suben al marcador; tantos que no deberían valer y se dan por válidos; tarjetas a jugadores por protestar mientras los rivales rompen piernas y salen impunes; fueras de juego inexistentes… Un sinfín de injusticias demasiado sospechosas.
Tiran el partido
El siguiente en ponerle la alfombra roja a la entidad madridista será el Celta de Vigo. Este domingo reciben al Madrid en Balaídos y Berizzo, el técnico de los gallegos, ya avisó que haría muchas rotaciones.
El Celta se encuentra inmerso en la lucha por llegar a la final de Copa. En la ida empató ante el Alavés en casa y todo se decidirá en Mendizorroza el próximo miércoles. Hasta aquí es comprensible.
Manipulación a la Liga
Lo que no es tolerable es que desprecien el partido. Que se manipule la Liga. Hasta el partido de vuelta de semifinales la mente del equipo estará puesta en ese partido. No existe nada más. Ni el partido ante los blancos.
A los vigueses les da igual adulterar la competición. No va con ellos. En el Barça se preguntan si hubiera sido más conveniente que pasara la eliminatoria el Real Madrid. Al menos los blancos no regalarían los puntos en su compromiso liguero.
En el vestuario blaugrana hay indignación. Opinan que el Celta le está tomando el pelo al Barça y a la Liga.
En otras ocasiones se mira con lupa lo que hacen ciertos equipos. No entienden porque se le permite al conjunto albiceleste condicionar el campeonato. ¿Será porque esta vez los puntos serán para el Real Madrid?
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