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La goleada en el campo del Betis tuvo un efecto terapéutico (1-6) para el madridismo, pero algunas tensiones internas siguen instaladas en el vestuario del Real Madrid. Zinedine Zidane debe gestionar una plantilla con muchos egos y algunos cracks están muy molestos con su rol secundario en el equipo. Es el caso de James y Morata, principalmente.
Florentino Pérez, un presidente muy intervencionista, ha recomendado algunos cambios al técnico francés en el Madrid-Legia de hoy con el enfado normal de Zidane.
Florentino Pérez, una vez más, ha pedido a Zidane que apueste por Danilo, un futbolista que costó 30 millones de euros y que no acaba de dar el esperado salto de calidad. El máximo dirigente, asimismo, también presiona para que Asensio tenga más minutos después de sus buenas actuaciones en la pretemporada y en los primeros compromisos oficiales.
James, el gran problema
Florentino Perez, sin embargo, sabe que tiene un problema mucho más grande con James Rodríguez. El colombiano es un futbolista básico para la expansión comercial del club en Sudamérica. Por él, además, pagó 80 millones de euros al Mónaco tras ser el máximo goleador del Mundial de Brasil (2014).
Zidane insiste en que James no está en un buen momento y utiliza el buen partido de Isco en Sevilla para justificar su exclusión del equipo. Florentino le pide paciencia y que, como mínimo, entre en las convocatorias. El presidente quiere que el técnico francés tenga mucha más mano izquierda con el colombiano.
El otro caso más delicado es el de Morata. En verano regresó al Real Madrid y siempre fue consciente de que no lo tendría fácil para desbancar a Benzema de la titularidad. Sin embargo, el madrileño tampoco esperaba que Zidane se decantara por su compatriota de manera tan notoria. El madrileño también ha perdido la batalla con Diego Costa en la Roja y Florentino pide más presencia de Morata en las alineaciones. En verano p agó 32 millones de euros a la Juventus para repescar al delantero.
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