Tercero en la Liga, a dos puntos del Barça (el equipo azulgrana ha disputado un partido menos), el Madrid es un caos. Las alertas se dispararon en el Bernabéu el pasado 21 de noviembre cuando el equipo de Luis Enrique se exhibió en el coliseo madridista (0-4) y la afición pidió la dimisión de Florentino Pérez. Desde entonces, el máximo dirigente busca soluciones de emergencias, pero sigue sin encontrarlas.
Florentino Pérez tiene dudas. Y, lo peor, no las puede disimular. Públicamente insiste que mantiene su confianza en Rafa Benítez, pero al mismo tiempo la cúpula del club desliza que el técnico está con la soga al cuello. En Valencia, el técnico se juega el cargo.
Zidane y Mourinho
El presidente de ACS pide mano dura a Benítez y, paralelamente, contacta con Zinedine Zidane y José Mourinho para saber si están preparados para asumir el mando del equipo. Con el técnico portugués los contactos se dispararon tras su despido como entrenador del Chelsea.
Florentino Pérez, aunque le moleste, sabe que está en manos de los jugadores. De unos profesionales a los que califica de “caprichosos”. El presidente del Real Madrid ha pedido el máximo compromiso a los futbolistas y ha escuchado su malestar con Benítez. Al mismo tiempo sondea el fichaje de Pjanic, por quien la Roma pide 45 millones de euros y ya circulan las primeras listas sobre los futbolistas del Madrid que han sido declarados transferibles.
El máximo dirigente pide calma, mientras prepara la gran revolución. En el Madrid de la próxima temporada habrá muchas novedades y bajas sonadas. Cristiano Ronaldo, James, Isco, Benzema y Sergio Ramos, entre otros, han sido declarados transferibles. Florentino Pérez necesita dinero para fichar. Actualmente, el Madrid no va sobrado de dinero y ACS, su empresa, no vive los mejores días.
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